Se destinó una nueva partida de aproximadamente 450.000 euros para el área de Servicios Sociales con el fin de ayudar a las familias en situación vulnerable y con menos recursos, ante la crisis provocada por la COVID-19. La gran mayoría de estos dineros provienen del superávit municipal del 2019 y el resto de las ayudas del Consell de Mallorca para financiar políticas sociales y hacer frente a las necesidades derivadas del coronavirus. “Estamos destinando todos nuestros recursos humanos, materiales y económicos para intentar paliar la situación provocada por la lucha contra la COVID-19. Especialmente, nuestros esfuerzos se focalizan en el área de Servicios Sociales, puesto que no queremos dejar a nadie atrás.”, explicó el alcalde de Inca, Virgilio Moreno.

Así pues, esta nueva partida presupuestaria se dedicará principalmente para el abastecimiento de productos de primera necesidad, como por ejemplo alimentación, artículos de higiene o medicamentos. Además, se ampliará también el servicio domiciliario y se incrementarán las ayudas de alquiler y pago de facturas de suministros (luz, agua, etcétera). En este sentido, Moreno destacó que “esta nueva partida nos permitirá anticiparnos y estar preparados si la situación empeora para poder cubrir las necesidades básicas de la población más vulnerable”.